Patrick Wilson demuestra exactamente quién es, y Jay Kelly lo confirma

Desde el primer segundo en que Patrick Wilson aparece en nuestra videollamada, queda claro el tipo de actor —y de persona— que es. Con una sonrisa amable y el tono cercano que lo caracteriza, enciende su cámara y comenta: “Déjame encender esto para verte. No me gusta hacer Zoom sin ver a la otra persona”. Un gesto sencillo que resume su estilo: auténtico, directo y genuino.

A pesar de que se encuentra en medio de una maratónica jornada de prensa por Jay Kelly —una fuerte contendiente para la temporada de premios— Wilson se muestra completamente presente. Con 52 años, el actor mantiene una energía admirable mientras conversa relajado en camiseta, justo después de una sesión de fotos. Su formación en Broadway, donde la concentración y el ritmo son vitales, parece seguir acompañándolo en cada proyecto.

Y no es para menos. Wilson está acostumbrado al ritmo intenso de Hollywood. Este año formó parte de dos universos gigantes: el de DC y uno de los mayores fenómenos del cine de terror. The Conjuring: Last Rites, su despedida como Ed Warren, se convirtió en el mejor estreno de terror de la historia. “Superó todas nuestras expectativas”, comenta. “Fue una mezcla de nostalgia, corazón y una campaña impecable. Estamos muy orgullosos”.

‘Jay Kelly’: el mejor guion que Patrick Wilson nunca leyó

Aunque cada película es distinta, Jay Kelly resultó una experiencia atípica desde el inicio. Lo más curioso: Wilson nunca leyó el guion completo. No por falta de tiempo, sino porque la estructura de la película no lo requería.

La historia, dirigida por Noah Baumbach, reúne a un elenco de “estrellas invitadas” que aparecen solo en algunas escenas. Wilson interpreta a Ben Alcock, un actor con una visión del oficio muy diferente a la del protagonista Jay Kelly (George Clooney). Esa dinámica hace que los personajes vivan en mundos separados, razón por la cual Baumbach consideró que Wilson no necesitaba conocer la trama completa.

Sorprendentemente, esa falta de contexto lo liberó.
“Fue extraño, pero muy liberador. Solo tenía mis dos páginas, y me concentré totalmente en ellas. Las escenas estaban tan bien escritas que bastaron para entender la esencia del personaje”.

Ben es un actor rodeado de gente, pero cargado de resentimientos. Lo conocemos en Toscana, recibiendo un premio que originalmente iba para Jay Kelly. Cuando este último cambia de opinión, ambos deben compartir reconocimiento, algo que hiere aún más el ego de Ben, quien ya siente que su representante, Ron (Adam Sandler), prioriza siempre a Jay.

Wilson incluso bromea sobre el talento de su personaje:
“Me encantaría ver las películas de Ben. No estoy seguro de que sea muy bueno”.

Nuevos proyectos y un 2025 lleno de estrenos

Wilson también adelantó su participación en una nueva serie de Apple TV, respaldada por Nick Antosca. Asegura que el elenco —donde destacan Amy Adams y Javier Bardem— aporta versiones completamente nuevas de personajes clásicos. “Creo que la gente se va a sorprender. Nosotros mismos lo hicimos”.

A esto se suma Thoughts & Prayers, la ópera prima de NB Mager, una comedia oscura que aborda el impacto del tiroteo escolar desde una perspectiva distinta: íntima, emocional y no moralista. Wilson destaca la visión de la directora y un elenco estelar con nombres como Elizabeth Marvel, Bill Camp y Molly Ringwald.

Un actor que sigue soñando en grande

Con una carrera llena de éxitos en cine, televisión y teatro, Wilson no tiene intención de frenar. Quiere volver a los escenarios, participar en más comedias y trabajar con directores que admira: “Ya tengo a Marty y Steven como productores, pero me encantaría actuar en una película suya”, dice entre risas, refiriéndose a Scorsese y Spielberg.

Aun así, vive agradecido por lo que ha logrado:
“Fui un chico de musicales en Broadway, luego parte de The Conjuring, y ahora trabajo con Noah Baumbach. Estoy más que bien. Me siento muy bendecido”.