Participante de “Love is Blind” demanda a Netflix y productora por $4 millones en arbitraje

La justicia puede ser ciega, pero es difícil apartar la mirada del lío legal en el que se ha convertido Love is Blind. Después de que el concursante Tran Dang presentara una demanda en octubre acusando a las productoras Kinetic Content y Delirium TV de agresión sexual, detención ilegal y negligencia, ahora es la participante de la temporada 5, Renee Poche, quien demanda a Delirium y Netflix para detener un arbitraje de $4 millones que los productores iniciaron en noviembre en su contra por “algunos comentarios públicos limitados sobre su angustioso tiempo en el programa, incluyendo las experiencias aterradoras que tuvo con Wall”.

Similar a las afirmaciones de Dang el año pasado, Poche detalla lo que supuestamente realmente sucedió detrás de las escenas sordidas durante su tiempo en Love Is Blind. “En su primera noche en Los Ángeles, el personal de producción del programa confiscó el teléfono, pasaporte y licencia de conducir de Poche”, dice la queja presentada hoy. “Cuando no estaba filmando, a Poche se le encerraba en su habitación de hotel, sin poder salir sin un ‘castwrangler’ que la acompañara. Se le prohibió expresamente interactuar no solo con otros participantes, sino también con otros huéspedes y personal del hotel al azar. En cierto modo, y este es un sentimiento compartido por muchos participantes, Poche se sentía como una prisionera”.

“Esta disputa está lista para la adjudicación porque Delirium ha iniciado el arbitraje contra Poche por supuestamente violar su ilegal acuerdo de no divulgación”, señala la demanda presentada en la Corte Superior de Los Ángeles por los abogados Bryan Freedman y Mark Geragos el 2 de enero. “Poche sostiene que el acuerdo en sí mismo es ilegal e inaplicable, y presenta esta acción para vindicar sus derechos legales bajo la ley de California”.

El juicio por jurado en busca de acción quiere una declaración judicial de que el NDA es “ilegal, inválido e inaplicable”, así como una serie de daños. Por supuesto, siempre siendo el contexto el rey, es importante ver la acción de Poche y su equipo legal en el panorama más amplio de una avalancha de demandas recientes de Reality TV de Bethenny Frankel y otros que intentan levantar el velo sobre cómo se hace realmente el drama no guionado, y no es bonito.

“El amor puede ser ciego, pero los abogados del estudio y de producción que redactaron estos contratos ilegales y los ejecutivos que encubrieron esto no lo eran”, dijo el abogado Freedman a Deadline esta mañana sobre esta última demanda de su firma y Garagos. “Sabían exactamente lo que estaban haciendo al crear estas disposiciones contractuales ilegales y ocultar secretamente la ilegalidad en un esfuerzo por silenciar a estos participantes”, agregó el destacado abogado. “Es todo parte del ecosistema de la Reality TV”.

“Estos acuerdos se están utilizando como espadas para amenazar a las personas y mantenerlas calladas, y también como escudos para ocultar su ilegalidad detrás de una firma y una actitud de decir ‘bueno, lo firmaste'”, continuó Freedman. “Demandar a Renee por 4 millones de dólares basados en una disposición ilegal de daños líquidos cuando ganó un total de $8,000 no solo es inconcebible, sino que resultará ser el error que abra la caja de Pandora de la Reality TV”.

Con NBCU ya retractándose de sus NDA de Reality TV para programas de Bravo y otros, y prometiendo mantener sus series no guionadas a un alto estándar, la demanda de Poche podría ser la punta de la espada de Damocles para productores, cadenas de cable y plataformas de streaming. “Tenemos cientos de clientes en espera”, amenaza Freedman. Ni Netflix ni Delirium TV respondieron a las solicitudes de comentarios sobre la demanda de Poche. En caso de que lo hagan, esta publicación se actualizará.

Fuente: Gematsu